Me paso algo curioso anoche.
Estaba cambiando de canales a la tele acostado en mi cama. Me harté de estar buscando y no encontrar nada que ver.
Apagué la tele y me acomode abrazando una almohada con las luces apagadas.
Y nada...
Nada, es decir depués de un rato me di cuenta que mi mente estaba en blanco, no pensaba nada. No sé cuanto tiempo habrá transcurrido.
Me sorprendí en serio, es dificil pero no imposible.
Hace tiempo una amiga que estudiaba tratamientos holísticos, me comentó que ella tenía un ejercicio similar.
Consistía en sentarse frente a un muro blanco y fijar la mirada en un punto y tratar de eliminar culquier pensamiento. La evolución es gradual, día con día.
De Noche
Hace 12 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario